Grandes poetas y escritores como Selnich Vivas, Juan Esteban Londoño, Hernán Vargascarreño y Amarú Vanegas, estarán en la 5ta Versión de la Feria Popayán Ciudad Libro 2022.
Por: El Nuevo Liberal
Del 23 al 30 de octubre se llevará a cabo de manera presencial la 5ta versión de la Feria más importante en el sur de Colombia, Popayán Ciudad Libro 2022. Este año contaremos con maravillosos escritores, reconocidos poetas a nivel local, regional, nacional e internacional, talleres de cuento, lectura crítica, novela, poesía, cine, fotografía, manualidades con expertos y apasionados a los libros y las artes. Tendremos lanzamientos de libros con sus autores conversando cómo fue su proceso de escritura creativa, conversatorios de diversos temas sociales, estéticos, espirituales, literarios, filosóficos, entre otros. Podremos disfrutar de presentaciones musicales y artísticas todas las noches en el Centro de Convenciones Casa de la Moneda, y uno de los momentos relevantes en la feria son las Galas de Poesía; para el día miércoles 26 de octubre a las 6:00 p.m. podremos contemplar la memoria, la armonía y la palabra de la poeta venezolana Amarú Vanegas, en compañía de los poetas colombianos Hernán Vargascarreño, Selnich Vivas Hurtado y Juan Esteban Londoño.
A continuación, conoceremos sus perfiles biográficos e intentaremos sentir su poesía:
Amarú Vanegas (Mérida, Venezuela).
Ciudadana del puente, poeta, ingeniera, actriz, performer, librera y productora. Jefa editorial de Nueva York Poetry Review y curadora de la Revista mexicana Ablucionistas. Magíster, Investigadora y Docente en Literatura. Fundó Púrpura Poesía y Catharsis Teatro. Realiza tertulias desde hace 10 años en América y Europa. Libros: El canto del pez, Dioses proscritos, Añil, Cándido cuerpo mío, Fisuras, Fiebre y Ábaco. Premios: Premio Internacional de Poesía Candelario Obeso (Colombia, 2016), Premio Internacional de Poesía Alfonsina Storni (España, 2019), Premio Ediciones Embalaje (Colombia, 2020) y finalista del Premio Internacional de Poesía Pilar Fernández Labrador (España – 2021, 2022).
Nombre
Vértigo del territorio jamás soñado.
Sermón de barro
que teme encontrar sus respuestas.
¿Quién eres?
¿Acaso un pequeño dios sin trincheras?
Abre las puertas
y sácame del laberinto
de tu boca de guerra.
Embalsama mi cuerpo,
cruza la lanza
a través de mis aguas
y ahuyenta
a quienes invocan mi nombre.
Poema de Dioses proscritos
Hernán Vargascarreño (Colombia, 1960).
Docente de literatura, poeta, traductor y editor del sello Ediciones Exilio. Sus libros son: País íntimo (2003), Piedra a piedra (2010) Tempus (2014), El viaje (2014), Montuno (2016), El niño que no sabía jugar a la paz (2017), Cuerpo laborioso (2019) y Lectores (2020). Entre otras, sus trabajos literarios han recibido las siguientes distinciones: Premio Nacional de Poesía Antonio Llanos (2000), Premio Nacional de Poesía sin banderas de la Casa de Poesía Silva (2003), Premio Nacional de Poesía José Manuel Arango (2010), Premio Concurso Nacional de cuento Ministerio de Educación-RCN (2012).
Cuchillos
Con este cuchillo he matado varios animales, he capado verracos y he abierto exquisitos frutos -nunca quisiera matar a un hombre. Siempre lo llevo al cincho. A los seis años me lo entregó mi padre: Esa es su hombría mijo, a cuidarla.
Cuando lo afilo en silencio, brotan de la piedra mis extraños pensamientos, los que voy afilando también para mis futuros días. Cuando lo hago brillar poniéndolo al sol, pienso en la vida de otro hombre, tan oscuro como yo.
Apenas tiene unos centímetros, y sin embargo, es el único límite entre dos
machos de estas montañas. Por él se nos va la vida en un instante. Por eso lo respetamos tanto, por eso nunca lo mostramos y lo acariciamos en secreto como algo sagrado. Tan brillante él, pero tanta sombra que hace.
Del libro Montuno
Juan Esteban Londoño (Medellín, Colombia).
Nacido en 1982, docente e investigador en las áreas de filosofía, literatura y teología. Doctor en Teología por la Universidad de Hamburgo (Alemania). Filósofo y Magister en Filosofía de la Universidad de Antioquia (Colombia). Tiene una Licenciatura y una Maestría en Ciencias Bíblicas en la Universidad Bíblica Latinoamericana (Costa Rica). Ha escrito diversos artículos científicos sobre filosofía, literatura y religiones. Es autor de la novela Evangelio de arena (Colombia, 2018), del libro de ensayo Hugo Mujica: el pensar de un poeta en la poesía de un pensador (Argentina, 2018) y de los poemarios El país de las palabras rotas (Nueva York, 2019) y Oráculos de Jezabel (Colombia, 2022), con el cual fue ganador del Programa Nacional de Estímulos del Ministerio de Cultura de Colombia.
¿Escuchas mi voz cuando me lees? ¿Sientes mi cuerpo envuelto en lienzos?
Oye el crujir de la carne, percibe el olor de la luz que se filtra por las hendijas de mi piel.
Escribo para no morir ahogada en la sangre de los pueblos invadidos.
No hay cielo, me repito, sólo el mar.
La poesía es mi barcaza, la claridad navega en ella.
Selnich Vivas Hurtado (Colombia)
Es escritor, ensayista, editor y profesor de literatura alemana y de literatura «minika» en la Facultad de Comunicaciones de la Universidad de Antioquia. Estudió Literatura en la Universidad Nacional de Colombia, Lengua y Literatura alemanas en la Universidad de Innsbruck, Austria, y se doctoró en la Universidad de Freiburg, Alemania, con la tesis «K. Migriert. Mediale Migration der Werke Kafkas in Kolumbien» (2007). Se formó como «Roraima, cantor ancestral» entre los minika del río Igaraparaná en la selva amazónica. Entre sus investigaciones se destacan: «Vasallos de la escritura» (2009), «Poetizar, un crimen» (2010), «Kirigaiai: introducción al estudio de los géneros poéticos minika» (2011) y « ¿Cómo leer la poesía indígena?» (2015). En 2011 recibió el Premio Nacional de Poesía Universidad de Antioquia por «Déjanos encontrar las palabras» (2012). Sus obras «Stolpersteine» (2008), «Zweistimmige Gedichte» (2013), «Finales para Aluna» (2013) y «Contra editores» (2014) han sido presentadas en países de América Latina y Europa.
Fakáriya
No sé por qué.
La palabra se ventea.
No sé por qué se ventea, la palabra.
Es viento,
Se ventea.
Se venteaa.
Jɨ, desde el origen.
Nuestra palabra es viento.
Ha sido bien venteada.
Se ven-, ven-, ventea.
No sé por qué la palabra se ventea.
No sé por qué es viento, la palabra.
Es viento,
Se ventea.
Se venteaa.
Jɨ, aquí, llamado Dɨjoma, tu palabra.
En verdad es viento y vamos a ventear.
A vente-, vente-, ventear.